Me gustaría imaginarme la cara de sorpresa que has puesto al leer "aclaraciones" sobre el curso ; pensando que no necesita ser aclarado, se podría decir que muchas veces podría ser enseñado o explicado. Pero, usar la palabra "correcciones" ya es otra cosa. En verdad que pensarías tu si te digo que no tienes en tus manos el curso tal cual fue dictado. Puede suceder dos cosas: una es que es imposible y la otra que puede ser verdad, ya que el curso se torna muchas veces inentendible y hasta incoherente en ciertas apreciaciones.
Muchas personas lo dejan de leer porque sienten mucha culpa al no poder llevar a la práctica el texto, si bien si pueden hacer las lecciones perfectamente.
Te cuento que pasó. Helen lo escribió tal cual fue dictado y su ayudante lo transcribió tal cual se lo pasó Helen. Luego el ego se metió y lo cambió. Se transformó en un libro que te agota, y muchas veces, si lo quieres explicar te deja sin fundamentos tanto a profesores del libro como a estudiantes. Eso es debido a los cambios que se hicieron, en palabras, oraciones y frases. Si te detienes a pensar, Jesús nunca hubiera deseado dictar un libro así.
Hay muchas palabras que van en mayúsculas y están escritas en minúsculas. Frases que nos resultan imposibles de poner en práctica, ya desde los Principios del curso como así también desde el prefacio.
Detenernos en el error sería un error, por lo tanto se está corrigiendo. Vas a notar como el libro cambia y todo se hace mas ameno. Y, por su puesto, que ahora tienes los fundamentos para mantener tu postura sin necesidad de decir: "lo dice el curso, no lo digo yo".
Jesús no dictó el curso en capítulos, tampoco puso títulos, ni subtítulos al texto y ni hablar de números. Si él lo hubiese deseado y su voluntad hubiera sido esa, él hubiera puesto los capítulos, títulos y subtítulos como así también los números, pero, no lo hizo. Lo hicieron algunas personas. Y como es obvio, lo hicieron mal.
Un buen consejo es no des concejos, mas me atrevo a darte uno. Lee el texto sin tener en cuenta nada de lo que el hombre agrego. Y si puedes ve a las correcciones y te encontrarás con el libro genuino tal como Jesús lo dictó.
No debe sorprenderte ya que con La Biblia hicieron lo mismo. Todo es cambiado de acuerdo a intereses personales. La Biblia no se puede corregir, te habrás dado cuenta que hay muchas y los mensajes difieren mucho de algunas a otras. Y en algunas no difieren tanto.
UCDM puede ser aclarado y corregido, te invito a que lo descubras y sientas el alivio de no tener culpas por no poder hacer algo que Jesús te pide, que en verdad no te pide, te hicieron creer, como de costumbre, que te pedía algo imposible. No es así. Jesús sabe muy bien de lo que eres capaz y de lo que serás capaz. Te lleva de la mano. Sin exigencias, ni culpas, si con voluntad y dicha. Que es para lo que lo dictó. Solo para tu felicidad.
